Esta es una escoba que ha cumplido su ciclo útil como voladora. Una noche cae del cielo con su dueña encima, una bruja vestida de negro que queda bastante maltrecha por el percance, en la huerta donde vive una viuda.
La viuda Shaw se compadece de la suerte de la bruja y la acomoda en su cama, envolviéndola con su capa y cerrando las cortinas. Horas después la bruja se recupera y llama a una compañera que viene al momento a buscarla, mientras la escoba es abandonada en la granja. Si bien la escoba no es buena volando, poco a poco, se muestra útil en cualquier tarea, incluso con su manguito toca algunas notas en el piano. Pero la novedad incomoda al pueblo, los vecinos de la viuda Shaw ven en la escoba algo maligno y surge la idea de quemar la escoba.
Para la viuda, lo último que se le ocurriría sería acabar con la escoba, de modo que pone lo mejor de su astucia femenina, para atender a los reclamos vecinales, pero sin afectar la integridad de su hacendosa compañera.
Al terminar de leer esta historia, uno se pregunta dónde está verdaderamente el miedo, si en la escoba con vida propia o en los hombres que no se les ocurre más que destruir lo diferente.
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| Dibujos realizados después de la lectura por los alumnos de 3° B (con netbook o a mano) |
Compartimos un video que está en la red, sobre el libro, para aquellos que no estuvieron y se perdieron la lectura y la belleza de los dibujos del autor.
Chris Van Allsburg (nacido el 18 de junio de 1949 en Míchigan) es un escritor e ilustrador estadounidense de libros para niños. Ganó dos veces la medalla Caldecott, por Jumanji (1982) y El Expreso Polar (1985), ambos textos escritos e ilustrados por dicho autor, y ambos de los cuales fueron adaptados más tarde en películas exitosas. Recibió la Medalla de Honor Caldecott en 1980 por El Jardín de Abdul Gasazi.
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